Después de sacar su almohada para el cuello y ponerse cómodo en su asiento,es hora de relajarse. Ya ha escuchado las historias de por qué no deberías comer comida de avión, sin embargo, tomó la decisión consciente de pedir una comida en el vuelo. ¿Qué sucede una vez que haya terminado con su comida pero aún le sobra un poco?
La desafortunada realidad es que la mayoría de los alimentos no consumidos se incineran o terminan en vertederos, señala msn.com
Según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) , las aerolíneas en los Estados Unidos y en todo el mundo crearon 6,1 millones de toneladas (el equivalente a 6,7 millones de toneladas estadounidenses) de residuos. Este es un aumento con respecto al año anterior en 2017, cuando las aerolíneas crearon 5,7 millones de toneladas (el equivalente a 6,3 millones de toneladas estadounidenses) de residuos.
A medida que más personas viajan, la IATA estima que en la próxima década, la cantidad de desechos podría duplicarse. Este es un gran problema a nivel mundial, ya que más personas volando significa más personas generando desechos.
Afortunadamente, las aerolíneas ahora están reconociendo la necesidad de ayudar a reducir el desperdicio y el reciclaje. Las aerolíneas como Alaska Airlines , Air New Zealand , JetBlue , Ryanair y Qantas están comprometidas a reducir el desperdicio a través de prácticas innovadoras y objetivos ambiciosos como alentar a los pasajeros a traer botellas de agua recargables y desplegar tazas de café hechas con materiales de origen vegetal en lugar de plásticos.
Si no estás de humor para comer comida de avión, no está solo. El fallecido chef, autor y personalidad de televisión Anthony Bourdain se negó a comer comida de avión y le dijo a Bon Appetit :
“Nadie se ha sentido mejor después de comer comida de avión. Creo que la gente solo la come porque está aburrida”.